Reseña “Becoming: Mi Historia” de Michelle Obama
Michelle Obama, la ex Primera Dama de los Estados Unidos, ha escrito uno de los libros con más ventas de los últimos tiempos. Se estima que unas 725 mil copias en ediciones de tapa dura, audio y libros electrónicos, fueron vendidas en los Estados Unidos y Canadá durante su primer día, lo que lo convirtió en el segundo debut más vendido de cualquier libro en 2018.
El libro se divide en tres partes: Mi Historia, (abarca desde su infancia hasta que comenzó a salir con Barack Obama y él le pidió un beso), Nuestra Historia (el noviazgo, la carrera de ambos, el matrimonio, el nacimiento de las niñas, la carrera política, la campaña electoral para la Presidencia de los Estados Unidos) y La Historia Continúa (desde que Obama es electo Presidente, su rol como Primera Dama hasta el final del segundo periodo presidencial). Acompañan a este libro un Prefacio, un Epílogo y fotos en orden cronológico muy puntuales acompañadas con textos expresado en el relato).
Es una autobiografía íntima, correcta y emotiva. Revela rasgos de su personalidad, su relación con el entorno y sus preocupaciones. También está presente el amor y la admiración por Barack Obama a lo largo de la relación de más de 30 años.
Tu historia es lo que tienes, lo que siempre tendrás. Es algo que debes hacer tuyo”. pág.13
Comienza el libro con una Michelle niña quien siempre tuvo conciencia de lo que podía lograr. Su padre y su madre, la criaron en la zona humilde de South Side en Chicago junto a su hermano mayor Craig. Vivían en el segundo piso de la casa de su tía abuela Robbie. Nunca tuvieron casa propia. No tuvieron bienes de fortuna pero sí mucha dignidad y valores. Fue una niña muy inteligente que estudió en un salón seprado con los alumnos más aventajados de varias edades.
Cuando rememoro la incomodidad de aquel momento soy consciente de que me enfrentaba al más universal de los desafíos, que consiste en conciliar quién eres con el lugar del que provienes y el lugar al que quieres ir”. pag.61
Para sus padres, siempre fue muy importante el que sus hijos estudiaran.
EL texto tiene un tono reflexivo. Muchas de las afirmaciones de Michelle Obama se refieren a lo que sintió al pertenecer a una minoría negra, esto ocurrió cuando estudió en la Universidad de Princeton. Ella nunca ocultó su origen y siempre dijo que venía del South Side de Chicago.
Rompió con los estereotipos, intentó representar una alternativa. Da la impresión de que siempre tuvo que demostrar, esforzarse mucho más que los demás, resaltar entre varones y hembras blancos.
Cada prueba de fuego que superaba me conducía a otra. Así es la vida de una chica que no puede dejar de preguntarse: ”¿Soy lo bastante buena?”, y todavía está intentando enterarse de la respuesta. pág.118
Su vida es la suma de esfuerzos, resultados y más esfuerzo. Ella afirma que siempre trató de ser reconocida. También expresa que no hizo lo suficiente por tratar de integrarse con compañeras de cuarto, blancas.
Michelle ha definido su superación como los peldaños de una escalera a la que se sube poco a poco. Ella logra entrar en Princeton y luego en Harvard, se gradúa de abogada. Su status a los 25 años es el de una profesional integrante del bufete Sydley & Austin, con traje Armani, un vehículo Saab , su propia asistente y un paquete salarial de 120 mil dólares al año.
Uno de los momentos más esperados del libro es cómo conoció a Barack Obama, un prometedor estudiante de Harvard, del que ella debía ser la mentora. Su nombre le pareció raro, muy raro.
Michelle experimenta una transformación en cuanto a su metas y lo que quiere en la vida, se da cuenta que el ser abogada no es lo suyo. Esta nueva conciencia se debe a su noviazgo con Barack, un hombre con mucha determinación y metas claras así como la muerte de una de sus mejores amigas a causa del cáncer. La muerte de su padre también influye en ella.
Su vocación se orienta hacia el tema de los valores, el buscar personas con cualidades inadvertidas y desarrollarlas se convierte en su norte en la organización Public Allies. Sintió que por fin hacía algo que le gustaba y el impacto en otras personas la hacía trascender.
Michelle cuenta sus problemas para concebir un hijo. La pareja recurre a la fecundación in vitro, lo que representó un gran sacrificio para ella. Al quedar embarazada, su vida da un vuelco que le trajo mucha felicidad. Su hija Malia nace un 4 de julio, el día de la Independencia de los Estados Unidos.
En el libro no todo es color rosa, Michelle cuenta los problemas matrimoniales que atravesó ya que Barack estaba mucho tiempo ausente, explica que visitaron a un terapista. En el transcurso de 11 años tuvo que sobrevivir a 5 campañas electorales.
De repente y tras un discurso televisivo, la posibilidad de que el senador Barack Obama se lanzara a la carrera presidencial, era un hecho. Michelle cuenta que se opuso a esa idea, aunque un día decide apoyarlo pero sin albergar muchas esperanzas. Al ser Barack un hombre negro, ella no creía que tenía oportunidad de ganar las elecciones.
Michelle cuenta cómo cambió la vida de su familia durante la campaña para ganar las primarias. Obama logra conquistar las preferencias de un difícil estado como lo era Iowa. Michelle lo apoyó y dio muchos discursos en diferentes lugares, iba muchas veces acompañada de sus pequeñas hijas Malia y Sasha.
Obama va superando obstáculos, gana la nominación demócrata, mientras tanto, los ataques arrecian, los artículos fabricados, los insultos, los inventos sobre el origen de Obama, en fin, Michelle llegó a sentirse muy desmoralizada.
Obama gana la Presidencia y Michelle dice que no existe un manual para ser Primara Dama. El Servicio Secreto les asigna sobrenombres.
Barack era Renegade, y yo Renaissance. A las chicas les permitieron escoger sus nombres de una lista de aprobada de opciones aliterativas. Malia pasó a ser Radiance y Sasha escogió Rosebud”. pág.352
Entre las iniciativas más destacadas que emprendió Michelle, estuvo una sobre alimentación saludable en los niños. En la Casa Blanca se plantaron toda clase de vegetales. Creó la iniciativa Let’s move para acabar con la obesidad infantil.
Confiesa que siempre le obsesionó el tema de la seguridad de su familia.
En el libro se refiere a la forma de gobernar de su esposo, el día a día que consistía en muchas actividades y en la noche revisar otro tanto de asuntos hasta pasada la medianoche. Barack leía todo, un trabajo duro y solitario.
Michelle comenta cómo Donald Trump lanzó acusaciones contra Obama, dudando de su nacionalidad, de que hubiera nacido en Hawái. Eso la hizo temer por su seguridad y la de su familia, al respecto dice que nunca lo perdonará por poner en riesgo a su familia. En sus críticas a Trump, no entiende como un sexista y misógino pudo ganar la presidencia del país.
El libro es una forma de reconocer y agradecer las oportunidades que tuvo en la vida, sabiendo de sobra que mucha gente no corrió con esa misma suerte. La gestión de Michelle tuvo una fuerte esencia social. Su preocupación por la educación es primordial. Cita que unas 98 millones de chicas, según la UNESCO, no tienen acceso a la educación.
Cuenta sobre su reacción el día que mataron a Osama Bin Laden, también el día que conoció a Nelson Mandela en Sudáfrica. Comenta lo bien que le caía a ella y a su esposo, la Reinal Isabel II de Inglaterra. Una de sus preocupaciones era la falta de control sobre armas ante hechos de violencia en escuelas con saldo de estudiantes inocentes muertos.
Sus hijas están presentes en el relato, ella narra los esfuerzos que hicieron para que la vida de Malia y Sasha fuera los más normal posible, cómo hacer para que las niñas fueran felices dentro de la burbuja que es la Casa Blanca.
Hacia el final cuenta cómo fue despedirse de todo el personal que la acompañó durante los 8 años. Esos trabajadores que terminaron convirtiéndose en su familia. Michelle despeja dudas sobre política, ella no va a incursionar en esta área.